El príncipe de Grecia es un libro que todos aquellos que son parte de la generación entendida en los tiempos, debe de leer. Hoy más que nunca, el Espíritu Santo está restaurando grandes verdades que fueron robadas a través del príncipe de las atmósferas o dios principal de los griegos. Conozca cómo el enemigo puso vendas a los ojos de muchas generaciones, y cuáles son las herramientas del Señor para volver a alinearnos con Sus tiempos proféticos o Moed.
Yom Truá es el primer día del Séptimo mes del Calendario de Yehováh y marca el comienzo de las Fiestas del Otoño. “Yom” significa día y “Truá” significa hacer un gran ruido. Por tal razón este día también es llamado el “Día de las Trompetas” o incluso el “Día de Gritos”.
Las fiestas del otoño son las fiestas proféticas que nos muestran el retorno del Rey, las bodas del Cordero y las recompensas y juicios en la Eternidad. Toda una simbología profética que nos amplía el entendimiento a través de las sombras que el Señor dejó en Su Palabra.
• Fiesta de trompetas o Yom Teruah.
Veremos la interpretación de la parábola de las 10 vírgenes desde la perspectiva de la cultura de aquellos días. Además veremos ¿qué sucedía en la antigüedad en este día específico?, ¿por qué es el día del soplo del Señor? y, ¿por qué se dice que también inicia un nuevo año dentro de los diferentes años nuevos que tiene la nación de Israel?
• Fiesta de Yom Kippur.
Aprenderemos la maravillosa simbología de esta fiesta del Señor y cómo esto nos conecta con la revelación de Apocalipsis y la multitud que lleva palmas en sus manos, y el día del veredicto de la corte celestial. Preparándonos para declarar una vez más que hemos sido justificados en la Sangre de Nuestro Rey y Salvador, y no hay condenación ni dedo acusador para quienes estamos en Él y vivimos en Su Palabra. Romperemos toda atadura de culpa que haya podido quedar en nuestra vida.
• Fiesta de Tabernáculos.
Una fiesta que será celebrada hasta en el reino del milenio. Llamada “La gran fiesta”. Una celebración bajo sus alas, un anuncio profético del pacto perpetuo. Estarás listo para entender este Moed, que celebraremos presentando nuestras primicias ante Él, para que la lluvia sea desatada sobre nuestras casas, lo que somos y todo aquello que representamos.
El Ciclo de Fiestas que se muestra en las estrellas representa la Boda Celestial. Las Fiestas de Primavera ensayan el Compromiso, y las Fiestas de Otoño son un ensayo de la Boda. Debemos abordar nuestra celebración de estos Moedim desde ese punto de vista. Si lo hacemos, no sólo agradaremos a Yahuah, sino que maduraremos de la leche de la Palabra a la carne de ella. En el proceso, cumpliremos “la letra” y nos prepararemos adecuadamente como la Novia; y tendremos nuestras velas encendidas cuando Yahusha regrese para recibirnos para sí. Ese mensaje escrito en las estrellas fue corrompido y muy pocos entienden lo que ese mensaje nos está diciendo hoy. Todos hemos sido engañados para rechazar El Pergamino Celestial y creer que todo lo que existe es el Zodíaco corrompido. Sin embargo, ese mensaje es el fundamento de La Torá, las Fiestas y la razón por la que Abraham intentó sacrificar a Isaac. Es el fundamento de toda pretensión de los reyes paganos de gobernar a la humanidad, y el fundamento de las proclamaciones de cada Profeta concernientes al Mesías. Este mensaje fundamental escrito en las estrellas por el Creador como testimonio para toda la humanidad se revela aún más en los pactos hechos entre el Creador y la humanidad. Cada pacto en la Biblia es semejante a un “pacto matrimonial” donde dos se convertirán en uno en mente, voluntad y propósito.
El Mesías vino hace 2000 años para mostrarnos el camino con el ejemplo a través de la Puerta Angosta hacia el Reino de Yahuah. Ese "camino" es a través de la Mikveh, la Circuncisión y la presentación de una Ofrenda al Altar de Yahuah. Después de mostrarnos "El Camino" en la Pascua, el velo se rasgó para darnos a todos acceso para seguir sus pasos. Desafortunadamente, ¡hemos sido engañados durante 2000 años! A todos se nos ha enseñado a celebrar la Pascua (que es un ritual babilónico) o a celebrar el Seder (que es un banquete pagano romano). Se nos ha enseñado un mensaje evangélico completamente diferente, que fue necesario que el Creador viniera y muriera para salvarnos, cuando la salvación es a través de un Mediador y Sumo Sacerdote elegido de entre los hombres. Este libro supera esas mentiras y establece firmemente el Camino y el ejemplo que el Mesías estableció, que debemos seguir para entrar por la Puerta Angosta.
En este libro devocional, presento una “guía de estudio” sobre la Pascua en 12 lecciones. Construyo el Hilo Escarlata de la Redención desde la creación hasta cuando el Mesías dio su vida como el Cordero Pascual. Resalto la intención detrás de los Días Santos de Primavera o la Temporada de Pascua. Coloco la Pascua en el contexto de la Voluntad del Creador escrita en el Rollo Celestial y la boda que proclama.
Cada lección se basa en la anterior hasta llegar a un clímax entre el verdadero sacrificio de un Cordero en la Pascua y el falso sacrificio de un cerdo en la Pascua. Este libro contiene las siguientes lecciones:
Lección 1: La Promesa Hablada, el Logos/Dabar.
Lección 2: El Hilo Escarlata de la Redención.
Lección: 3 Contenidos del Rollo Celestial.
Lección 4: ¿Por qué sacrificar un cordero en la Pascua?
Lección 5: Cruzando al otro lado – El Gran Éxodo.
Lección 6: El Camino de la Mikveh, la Circuncisión y la Ofrenda.
Lección 7: La Puerta Angosta.
Lección 8: El propósito de la temporada de Pascua.
Lección 9: El día de preparación de la Pascua.
Lección 10: La Fiesta de los Panes sin Levadura, la Gavilla Mecida, las Semanas y Shavuot.
Lección 11: El paganismo bautizado.
Lección 12: La abominación de la desolación.
Ser parte de la familia de Dios (YHWH) es verdaderamente una bendición. Tenemos el privilegio de llamarnos Sus hijos. Si nos consideramos Sus hijos, debemos seguir Sus instrucciones para ser una verdadera luz para todas las personas y apartarnos de las cosas del mundo. Una de las cosas que nuestro Padre nos pide es que guardemos Sus fiestas (tiempos señalados). Estas no son fiestas judías, son Suyas. (174 páginas)
